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    Las carillas dentales suelen formar parte de los tratamientos estéticos más demandados porque su aplicación es muy útil, indolora, rápida y mínimamente invasiva; con la que se consigue restaurar y/o mejorar las piezas dentales preservando la estructura del diente y por tanto, su naturalidad y funcionalidad. Con ellas se consigue obtener una dentadura natural, resistente y sin marcas o bordes oscuros que las hagan diferenciar de sus piezas naturales.

    En la actualidad las carillas son consideradas como una de las técnicas reconstructivas adhesivas que proporcionan una estética dental excelente con una mínima alteración del tejido dentario con resultados mas favorables, tanto por su duración como por su aspecto estético..

    Las carillas consisten en finas láminas de cerámica o composite que se adhieren a la superficie visible de los dientes anteriores y cuya finalidad es la estética y la correcta función. Hoy en día se considera una de las opciones terapéuticas de reconstrucción indirecta mas recomendada.

    Gracias a los últimos avances en la nanotecnología, somos capaces de colocar las carillas sin tallar los dientes. Modificar forma, color, corregir ligeros apiñamientos o simplemente eliminar los matices del paso del tiempo como las antiestéticas troneras gingivales (espacios negros entre dientes y encía) es hoy posible con el uso de carillas.

    Las carillas suelen formar parte de los tratamientos estéticos más demandados porque su aplicación es muy útil, indolora, rápida y mínimamente invasiva; con ellas se consigue restaurar y/o mejorar las piezas dentales preservando la estructura del diente y por tanto, su naturalidad y funcionalidad. Las carillas permiten obtener una dentadura natural, resistente y sin marcas o bordes oscuros que las hagan diferenciar de sus piezas naturales.

    DISEÑO DIGITAL DE LA SONRISA

    El concepto de Digital Smile Design (DSD) pretende presentar al mundo una nueva cara de la Odontología, más humana, emocional y artística, pero también más eficiente y precisa.

    Centrándonos en la estética, hay que tener en cuenta que muchas personas tienen complejos con su boca y con su sonrisa. En una sociedad cada vez más preocupada por la imagen, esto les genera muchas inseguridades y, en ocasiones, incluso falta de autoestima.

    El concepto se basa en el análisis de proporciones faciales y dentales de un paciente usando una serie de vídeos y fotografías para entender la relación entre dientes, encías, labios, sonrisa y las características de la cara en movimiento.

    Esta herramienta permite diseñar la sonrisa y que el paciente pueda ver el resultado final en su boca antes iniciar el tratamiento.

    Esto contribuye a disminuir la incertidumbre y hace posible no solo que el paciente vea lo que podemos conseguir, sino también, si fuera necesario, que participe a la hora de hacer las modificaciones pertinentes para llegar a la solución óptima para su caso.